Deyadira Rijo Tolentino; una voluntaria ejemplar nominada al PNJ

Categoría: Servicios Sociales Voluntarios a Favor de la Comunidad

Jóvenes de Hato Mayor nominados al Premio Nacional de la Juventud 2020; Parte 5 de 9

Contribuir a la sociedad de manera voluntaria sin esperar una retribución económica sino, más bien, para ayudar a que una comunidad especifica o un país mejore las condiciones de sus ciudadanos y que todos tengan las mismas oportunidades, es un valor que no acompaña a tantas personas en estos tiempos modernos; sin embargo, sí existen quienes modelan estas cualidades, como es el caso de la joven Deyadira Rijo Tolentino, nominada al Premio Nacional de la Juventud en la categoría, Servicios Sociales Voluntarios a Favor de la Comunidad.

Deyadira tiene una maestría en Dirección, Evaluación y Calidad de las Instituciones de Formación, de la Universidad de Sevilla, España y es egresada de la carrera Licenciatura en Lenguas Modernas Mención Inglés, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

Actualmente, trabaja como docente en el Centro Educativo La Trinidad, impartiendo las asignaturas inglés y francés a los adolescentes del nivel secundario; luego de su jornada como maestra trabaja como voluntaria en el Centro Tecnológico Comunitario (CTC) ubicado en el sector Los Multis, de Hato Mayor del Rey.

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Para Deyadira la preparación académica ha sido importante por lo que le ha dedicado mucho tiempo a adquirir nuevos conocimientos en diferentes áreas como inglés técnico y avanzado, informática, curso en dirección y supervisión de centros educativos, técnicas de oratoria, entre otros cursos y talleres complementarios a su área de trabajo y profesional.

Trabajo voluntario                     

Pertenece a la familia de los Centros Tecnológicos Comunitarios (CTC) desde hace 3 años; allí desempeña el rol de gestora administrativa, la cual, según expresa, es una de las labores más hermosas que ha realizado en sus años de servicio. Incluso, una de las razones por la que decide ingresar a los CTC es poder trabajar con familias vulnerables de la comunidad, brindándoles servicios y ayudándoles a mejorar su condición de vida, mediante las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

«Esta institución me brinda la oportunidad de poder llegar a cientos de hogares de nuestra población, trabajar intensamente, con empatía, pasión y respeto, para mejorar la calidad de vida de los más necesitados, siendo esto uno de nuestros principales valores “ser solidarios”, además de trabajar con humildad, integridad y responsabilidad», expresa Deyanira.

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Como parte de la labor voluntaria que realiza desde esa institución, visita las zonas vulnerables y alejadas de la cuidad para llevar charlas y talleres con el fin de concientizar a niños, jóvenes y personas adultas sobre el correcto uso de las nuevas tecnologías, de una buena alimentación y de cómo insertarse en el mercado laboral. También, sobre temas relacionados con emprendimiento, y de alguna manera poder contribuir al avance y desarrollo de la población más necesitada.

Asimismo, los CTC brindan cursos, diplomados y clubes en el área de las tecnologías para quienes tienen deseos de superación y de esta manera aportar a su crecimiento personal y profesional.

Además de servir en CTC, colabora con los miembros de su iglesia. Actualmente está al frente de los adolescentes de la Iglesia de Dios de la Profecía, donde trabaja en su formación y crecimiento en la palabra de Dios.

Cada línea escrita aquí confirma que Deyadira es más que merecedora de esta nominación y también de obtener este premio el próximo 31 de enero, día en que el Ministerio de la Juventud llevará a cabo la premiación. Y como ella misma dice “vendrán tiempos mejores”.

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